Sólo son notas, como gotas de agua tocadas suavemente por dedos firmes.
Van acariciando largos cabellos entorchados en metal y le siguen diez dedos más posándose a ritmo sobre unas teclas de marfil.
Se rodearon de edificios negros en un parque soleado, despertando así la curiosidad de transeuntes y trasnochados que abrían su ventanas con cerveza en mano para que el festival de Jazz de Terrassa tomara posesión de un domingo de Abril.
Y así, como si chasqueara una invisible pieza de dominó, el contrabajo, provocó que las demás notas comenzaran a caer dejándose llevar por el grave contorno de su sonido, el trombón y la trompeta son hemanas que conversan sobre la dulzura de una resaca, ordenan el caos formando un continuada melodia y prosigen junto a los demás instrumentos hasta el final de una tarde colapsada ya de intrigados oyentes.
Músicos a la vanguardia en el uso del cemento como propursor de acústicas, derribando barreras intocables y haciendo del parque su auditorio...
(Festival de Jazz de Terrassa, Barcelona, 2006)
2 comments:
Maravilloso el despertar musical
de aquel domingo primaveral...
Hola! soy Javi un amigo de Rosa (tu prima) le he estado echando un vistazo a tu blog y me ha parecido muy interesante pues, ante todo, me gusta la literatura la música y las pequeñas cosas bellas. Yo también tengo un blog en curso www.extremadurablog.com/elavelira. Espero que te guste y podamos intercambiar ideas.
Un saludo.
Post a Comment